Casi al borde del fin de año, Yamaha ha anunciado al mundo los cambios respecto a la que es una de sus familias más famosas y de mayor éxito: la gama de scooters X-Max y T-Max. Y en lo tocante a lo que a nosotros nos interesa, el X-Max 125, se ha realizado una adaptación a la normativa Euro 5 de esas de quitarse el sombrero.


Para empezar, una de las cosas más importantes, la potencia (particularmente en el octavo de litro, donde cada caballo de vapor vale su peso en oro), se ha mantenido en este modelo en 14,4 CV, lo que es una gran noticia, que lo sigue situando entre los modelos más top de la categoría.

De todas maneras, por suerte, las alegrías no terminan aquí.

El X-Max 125 2021, lejos de salir perdiendo con la adaptación a la normativa anticontaminación (cosa que sucederá con una amplia mayoría de modelos de 125), es ahora un scooter bastante mejor, y eso tiene mucho mérito.



Al margen de mantener la potencia, se ha aprovechado para renovar el árbol de levas y añadir válvulas de distribución variable, lo que sin duda redundará en un funcionamiento más fino del motor.

Por otro lado, se le ha aplicado una cura de adelgazamiento, y ahora el peso total es de 9 kg menos, parando la báscula en 166, lo cual es una mejora nada despreciable. Además, se incorpora un sistema Start&Stop, que deja el consumo en unos escuetos 2,3 L a los 100 km, una cifra realmente baja.

En cuanto al resto de cambios, se ha alargado la longitud total entre ejes (1570 mm) para lograr una mayor estabilidad, se ha aumentado la altura libre al suelo (140 mm) y se ha retocado la suspensión trasera, añadiendo mayor recorrido de muelles.

Ciertamente, toda esta retahíla de mejoras se unen a otros detalles exclusivos que ya conocíamos de la versión anterior, como el control de tracción o el gran equipamiento, como un cuadro de relojes completísimo, el arranque tipo keyless (sin llave) o la pantalla ajustable en altura.



Sin duda, con todas estas especificaciones, el Yamaha XMax 125 2021 sigue situado entre lo más granado de la categoría del octavo de litro. Lo malo es que a nivel de precio también permanecerá posicionado entre los modelos más caros, pues se mueve en una horquilla que para muchos (servidor incluido) es ya un poco absurda.

Así, el renovado XMax se podrá adquirir desde ya en los concesionarios por la ‘módica’ cifra de 5.000 € (200 más que el modelo Euro 4), contando además, con una versión especial denominada Tech Max, que también existía antes, que se ofrece por 5.400 € a cambio de colores exclusivos, y cuatro detallitos estéticos (costuras de color en el asiento, estriberas metálicas, luz de posición aumada…) que, desde luego, no justifican de ningún modo 400 € extra en una factura que ya de por sí es extraordinariamente abultada.

En fin… modelos premium los llaman.



Si el dinero no es un problema para ti, sin duda este Yamaha es una opción a estudiar, al que yo compararía al menos con el Honda Forza 125 antes de tomar una decisión, que se mueve en el mismo rango de precios disparatados. Desde luego, cargados de chucherías sí vienen, pero para el común de los mortales suponen un gasto ridículamente alto (hay motos de 250, 300 y hasta 500cc por esas cantidades).

La parte positiva es que se ha mejorado el modelo en no pocos apartados y que, por descontado, va a seguir siendo de lo mejorcito de la categoría. Aunque su precio de tarifa quede muy lejos del término asequible, nunca está de más que haya opciones en el mercado para todos los bolsillos.

Pablo Ortiz
akiramotos.com